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Ojeando la biblioteca digital de la Universidad Autónoma de Nuevo León, encontré dos tomos de memorias del General Bernardo Reyes dirigidos a la legislatura del Estado. En el Tomo I [1] me llamaron la atención los signos que los ganaderos utilizaban para marcar sus ganados y los métodos que utilizaban para su registro. Mi padre era herrero y en más de una ocasión lo vi forjar marcas para ganaderos. La verdad es que no sé nada del procedimiento que se siga hoy en día, sé que los métodos tienden a ser más "humanos" y menos invasivos hacia los animales usando "etiquetas" en las orejas y dispositivos con chips. De cualquier manera supongo que hoy día sigue usándose el método de marcar las piezas con yerro candente como se ha acostumbrado durante siglos.
El Registro
de marcas y señales para ganados vacuno, caballar y bovino en la Tesorería
General del Estado de NL, según un memorial del General Bernardo Reyes (Gobernador
entre 1885 y 1909), se estableció en el estado en 1826.
Por
conducto de los Alcaldes primarios de los pueblos o directamente los
interesados, presentando ocurso al Gobierno, solicitaban una marca para sus
ganados. Estas Marcas no correspondían a un sistema preciso o numérico en su confección, sino que se
establecían según el gusto del interesado y se garantizaba la singularidad de
cada marca mediante el registro que no permitía dos iguales.
Las marcas
eran de 18 por 10 centímetros y se aplicaban con yerro candente en la parte
posterior de la pierna izquierda del animal. Si llegase a haber dos marcas
iguales, se presumía que el dueño de los animales sería quien tuviese la marca
registrada.
El estado
de NL en 1896 no tenía marcas para ganado bovino.
Los
alcaldes solicitaban la marca al gobierno estatal a nombre de los interesados en papel
simple con estampillas de cincuenta centavos por cada foja y éstos últimos, abonaban
6 pesos para las rentas del estado y la contribución federal correspondiente. Las
marcas se registraban en el libro correspondiente en la Tesorería y se publicaba
periódicamente una circular con las nuevas marcas. La circular debió ser parecida
a la que incluyo más abajo (quizá en varias fojas).
El tiempo
transcurrido entre la presentación de una marca y su validación, variaba según
la distancia de las poblaciones donde residían los interesados, pero nunca más
de un mes a partir de la fecha de solicitud.
La señal o
marca presentada ante la autoridad, se dibujaba al margen del libro de registro
y se ponía a continuación el nombre del dueño, fecha de presentación, etc.
Las
transferencias de marcas, sea por venta herencia o donación se tramitaban ante
las autoridades encargadas de juicios hereditarios o ante los escribanos
encargados de los contratos de traspaso. Los interesados abonaban un derecho por transferencia conforme
al valor del traspaso y los boletos (o comprobantes) que acreditaban la
propiedad de la marca eran definitivos.
En la terminología usada se hacía diferencia entre SEÑAL (que era el signo aplicado a la oreja del animal vacuno o bovino) y MARCA (la figura o signo aplicado en cualquier parte del cuerpo).
[1] REYES, Bernardo Memoria que el Ciudadano Gral. Bernardo Reyes, Gobernador Constituconal del estado de Nuevo Leon presenta a la XXX Legislatura del Mismo y que corresponde al período transcurrido del 4 de Octubre de 1895 al 3 de octubre de 1899. Tomo I Tip. del Gobierno en Palcio, Monterrey NL, 1899.
[2] FALCONNET, Louis Mexique, 1865 Getty Research Institute Digital Collections
3 comentarios:
Leoncillo:
Muy bueno leerte de nuevo. Muy interesante todo lo relativo a las marcas. ¿en cuál apartado del informe se pueden consultar?
Es impresionante ver la extensión del informe de Bernardo Reyes en comparación a sus antecesores del siglo XIX, en donde las memorias consistían en unas pocas hojitas con información muy básica.
El progreso "porfiriano", al que haces referencia en tu entrada posterior, fue un hecho sin duda para toda la república, independientemente de los yerros en el campo democrático.
Un saludo de nuevo.
Gracias J. Crouset por el comentario. Había estado bastante ocupado y sin tiempo para este pasatiempo de leer y escribir blogs. Voy a pasar por el tuyo para ver qué haz posteado últimamente.
Sobre el enlace de la memoria de B. Reyes, sucede algo extraño. Me parece que hay problemas entre la página htlm y los enlaces PDF correspondientes. Para llegar a los documentos PDF del ese tomo I debes primero ir a este otro enlace:
http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1080042322_C/1080042895_T1
y allí escoger el enlace terminado en 068.pdf y los sucesivos (que son los relativos al ganado).
No sé si tu logras acceder a los apartados desde el primer enlace .htlm Yo no pude, de hecho llegué por casualidad a este tomo I, que no lo podía encontrar ni con una búsqueda por autor en la página principal de la colección digital de la UANL. La verdad es que no sé si sea cosa de la página de la UANL o de mi computadora o servidor.
Los textos llevan por título Documento XIV
Gobierno Interior
Jefatura Política de Dr. Arroyo...
Anexo No. 230 y siguientes.
déjame saber si logras acceder a los documentos. Buena suerte, saludos.
Gracias por la liga. Efectivamente, los enlaces a los archivos PDF no funcionan, pero llegué a través de la dirección que me envías y pude encontrar los fierros de Lampazos, que eran los que me interesaban.
Los de años posteriores, a partir de 1912, son consultables en el POE del sitio de la Hemeroteca Nacional, que abarcan hasta 1978. Por cierto; no tengo idea como le hacían para no repetir marcas, que se antojan algunas bastante similares.
Saludos de nuevo.
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