El
Perico
Otro tema musical mexicano del s XIX es: El
Perico. Lo gracioso de este perico (siendo perico debía sin duda tener
algo gracioso), es que cuando la melodía
llegó a los a Estados Unidos a través quizá de algún miembro de la banda de
música, un soldado, voluntario (como se indica en una entrada anterior) u otro,
imposible saberlo, un músico alemán, Charles Grobe (1817- 1897), que había llegado desde joven a Baltimore y
era maestro de música en el colegio para mujeres de Delaware, integró nuestro
perico en una obra más extensa con el título “Veni, Vidi, Vici La Batalla de Buena Vista. Una Fantasía
descriptiva para el Piano. Compuesta y con gran respeto dedicada al Gen. Z
Taylor. El héroe que nunca perdió una Batalla por Ch. Grobe. Opus 101”[1]
A
mediados del siglo XIX, en Estados Unidos se estaba popularizando el uso del piano. Los americanos amaban este instrumento por
ser un elemento de esparcimiento y un signo de afluencia económica y estatus
social para la familia que podía adquirirlo. Sólo en 1851 se construyeron y
vendieron unos 9 mil pianos y aproximadamente 21 mil en 1860. Es decir un piano
por cada 1300 americanos[2].
El furor por los pianos estuvo unido a la demanda de partituras y álbumes de
piezas musicales. Aparecieron muchos músicos y compositores para responder a
tal demanda, pero la calidad no estuvo generalmente a la par de la cantidad. Charles Grobe supo aprovechar
esta coyuntura y compuso 1348[3]
piezas musicales a lo largo de su carrera musical. Se dice que es el compositor
más prolífico de su época.
En lo que respecta a la pieza de la Batalla
de Buena Vista de Grobe, según
Robert Stevenson: “fue una más
dentro de la larga procesión de costosas
batallas editadas por
Willig… Lo que era
incuestionablemente nuevo en
la edición de
13 páginas de la
Buena Vista, de
Grobe, era la marcha
mexicana de la
página 4”, [4] es
decir “El Perico”.
Yo creo
que Grobe supo integrar esta melodía en la obra completa como un toque
autóctono de una remota batalla. Sin embargo, la ejecución al piano no
transmite las penurias y atrocidades que puede haber en una guerra. Baltimore
está muy lejos del peligro, el autor no vive la guerra. Compuso una obra para
que la tocaran sus alumnas en el colegio de música. De cualquier manera, la
pieza musical no deja de ser un documento histórico valioso. El autor coloca
sobre cada tramo de la obra una descripción de lo que la música quisiera
transmitir, de tal manera que comienza con el levantamiento del campamento de
Agua Nueva por parte del Gen Taylor y su búsqueda de una posición segura en
Buena Vista, para después dar paso a la aparición del ejército mexicano tocando
“su marcha favorita: Perico”. La pieza continúa describiendo los
movimientos, estrategias, etc., de la batalla, con su respectiva marcha fúnebre
por los caídos y la mención de honor de los héroes, con que termina la pieza[5].
¿Pero
qué hace un alegre perico metido en el fuego cruzado de la batalla de Buena
Vista?
Esta
melodía insertada en la obra como una
marcha me parece sea, más que una marcha militar, una canción popular o una
melodía folklórica del pueblo mexicano, un “jarabe”. En este género los aires más conocidos
a finales del siglo XIX eran: “el Palomo,
el Atole, los Enanos, el Perico y la
Diana”[6]
Juan Cordero, en su obra La Música
Razonada (1897), escribe: “Cada uno
de esos aires tiene en sus movimientos un
carácter imitativo. Durante el Palomo el varón y la hembra, que forman
la única pareja remedando á las palomas, se acercan y retiran alternativamente
las cabezas como para unir los picos, y describiendo en su marcha una
circunferencia, parecen buscarse y huirse á la vez; durante el Atole, mientras
los circunstantes cantan la copla, la pareja ejecuta un zapateado en movimiento
moderato; durante El Perico, los
bailadores intentan alternativamente con cada uno de los pies una marcha que
llegan á desarrollar, luego con los pies, marcan un stacatto alusivo sobre las
palabras: "Pica, pica, pica,
perico" La Diana se ejecuta por los bailadores con un zapateado
sostenido de movimiento rapidísimo”.
Si los
ejércitos de Santa Anna hacían acto de presentación tocando su canción favorita
“El perico” y el subconsciente de los paisanos compatriotas tarareaba “pica, pica, pica, perico” no es difícil
darse cuenta por qué nos fue tan mal en la susodicha guerra. En fin, ya no hay
vuelta atrás.
De la
melodía integrada como parte de una obra mayor tengo dos versiones:
1.
La de Charles Grobe en su “Batalla
de Buena Vista“. La pieza comienza en Sol mayor y en 4/4. Una vez que
termina la primera parte correspondiente
a la actuación del Gen. Taylor y el ejército norteamericano, aparece la melodía
mexicana en Do Mayor y en 6/8 con un
volumen muy bajo (así lo indica la pieza: piano).
El volumen de la melodía parece ir en aumento “primero con un
bajo de Alberti, luego
con acordes galopantes
marcados crescendo, para
seguir el avance de la banda
mexicana”[7] Esta Versión la elaboré yo con la ayuda de un
programa de música digital pero sigo al pie de la letra la partitura original,
que por otra parte es excesivamente detallista en indicaciones de
interpretación.
2.
La versión de Julio Ituarte (compositor mexicano del
S XIX) integrada en un “capricho de concierto para piano”[8] con el título Ecos de México, compuesta
hacia 1880 “reúne una refinada sucesión
de temas entrañablemente locales como el Palomo, el Perico, los Enanos, el
Butaquito, el Auajito, el Jarabe y las Mañanitas”[9].
Aquí es interpretada magistralmente por Silvia Navarrete (en 1998).
De la versión individual del Perico tengo también dos interpretaciones:
3.
Una en acordeón
de Antonio Barberena que sigue la
partitura de Grobe y está en Youtube en el canal titulado La Historia Oculta de México.
.
4.
Y por último mi
propia versión, en la que sigo la partitura de Grobe pero me concedo
libertades en el acompañamiento a la melodía principal. Mi interpretación (o de
mi PC) lleva la Mandolina (lo más cercano al Bandolón que encontré en el programa digital) acompañada de la Guitarra y la Mandola con intervenciones del Arpa.
[1] “Veni,
Vidi, Vici The Battle of Buena Vista A
Descriptive Fantasie for
the Piano, Composed
and most respectfully
inscribed to Gen. Z.
Taylor The Hero
who never lost a
battle by Ch. Grobe.
Opus 101.” (Baltimore: George
Willig, 1847)
[2]
Cfr. STARR, S, Fredrick Louis MoreauGottschalk Music in American Life University of Illinois Press, 2000 ISBN 0252068769,
9780252068768
[3] IBIDEM
[4] Stevenson Robert Visión norteamericana de las otras Américas
hacia 1900. Revista Musical Chilena on line.
[5] El documento se puede
consultar integro en la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos:
[6] CORDERO, Juan N. La Música Razonada, Vol V Estética teórica
y aplicada, México 1897
[7] Stevenson op. cit.
[8] ITUARTE, Julio Ecos de México (Aires Nacionales). Capricho
de Concierto para Piano. Mexico H. Nagel, c. 1880 15 páginas.
[9] FLORESCANO, Enrique ElPatrimonio de México, II Fondo de Cultura Económica, 1997 ISBN 9681654536,
9789681654535 p. 107.